El pasado lunes 23 de mayo, tuvo lugar en la Academia de Ingenieros, un importante acto aunque con escasa repercusión para el conjunto de los alumnos, pero de gran relevancia para un pequeño grupo de nosotros que ese día celebramos nuestra confirmación.
Aquellos que participamos en el acto pertenecíamos a diferentes cursos de la Academia: primero, segundo y tercero de la escala de suboficiales, así como quinto curso y militares de complemento de la escala de oficiales. También recibieron el sacramento un alabardero y su novia así como la esposa de un sargento alumno.
Durante todo el año habíamos estado asistiendo a catequesis preparatorias impartidas por nuestro páter Luis Miguel, que con una encomiable paciencia y sacrificio, ha sido capaz de lidiar con los diferentes horarios de cada curso, maniobras y demás actividades académicas. Todo ello con el fin de que fuéramos capaces de adquirir unos conocimientos y valores cristianos, necesarios para llegar preparados a tan importante día. Su ejemplo, su dedicación, y su entrega desinteresada hacia nosotros, han sido una de las mayores enseñanzas que hemos podido obtener durante este periodo.
Volviendo al desarrollo de los actos, la eucaristía en la que se desarrolló nuestra confirmación estuvo presidida por el Vicario General del Arzobispado Castrense de España, don Pablo Panadero, con el apoyo de nuestro Páter. En esta eucaristía, el Vicario nos dedicó unas palabras muy bonitas sobre el significado de este acto, y la importancia que debía tener en nuestras vidas. Es de agradecer también la gran vitalidad y entusiasmo que desprendía don Pablo en todo su discurso, y que ayudó a que sus palabras calasen hondo dentro de nosotros.
De esta forma, bajo la atenta mirada de nuestros padrinos, de nuestro Coronel, y de otros mandos de la Academia que asistieron a este acto para arroparnos, cada uno de nosotros pudimos ser confirmados frente al altar.
Posteriormente, se organizó una visita al museo de la Academia, un lugar casi desconocido para muchos de nosotros que lo visitábamos por primera vez. La visita estuvo guiada por el subteniente Regidor, que nos descubrió una serie de tesoros que deleitaron por igual a alumnos y familiares.
Después de terminada la visita, y dentro del apretado plan del día, asistimos a una conferencia impartida en el salón de actos de la Academia, por doña María Julia Bordonado Bermejo. Como resaltó al final de la conferencia nuestro Coronel, no sólo la presentación nos mostró la relevancia del Arma de Ingenieros a lo largo de la historia, sino que además nos ofreció unas pautas y consejos de vida para el desarrollo personal de cada uno de nosotros.
La jornada finalizó con una comida en compañía de los mandos de la Academia que habían ejercido de anfitriones para el desarrollo de nuestra confirmación. Sentadas a la mesa, nuestras familias pudieron reponer fuerzas y charlar distendidamente con el resto de comensales.
Tras acabar la comida, nuestros familiares y amigos se despidieron de la Academia y nosotros los alumnos, volvimos a nuestras tareas algo cansados después de la intensa mañana, pero con una gran satisfacción por la importancia del acto realizado, ¡nuestra confirmación!
C. A. C. MILCOM Miguel Arrieta Pey.