En la mañana de hoy el Arzobispo Castrense, Monseñor Juan del Rio, ha presidido la Santa Misa en la Iglesia Catedral de las Fuerzas Armadas celebrada con motivo de la festividad de los Ángeles Custodios patronos del Cuerpo Nacional de Policía.

A la Eucaristía ha asistido una amplia representación de agentes de policía pertenecientes a la Jefatura Superior de Madrid, encabezados por su jefe superior, que han estado acompañados, entre otras autoridades, por la delegada del Gobierno en Madrid y el general jefe de la Dirección de Acuartelamiento de Madrid.

El Oficio religioso ha sido concelebrado por el vicario episcopal del Cuerpo Nacional de Policía. El rector del Seminario Castrense ha sido el maestro de ceremonias y contó con la participación de varios seminaristas.

Al inicio de la homilía D. Juan del Rio resaltó la importancia de los Ángeles Custodios como garantes del Cuerpo Nacional de Policía y calificó a los agentes de policía “como servidores del bien público  Y como todo servidor tiene momentos gratos pero el servicio, como es el caso de un padre o de una madre siempre necesita ayuda y protección. Vosotros sois servidores de los ciudadanos, a la nación y a la Patria. Y necesitáis como los padres y madres de familia también ayuda y protección”. Y precisamente en la celebración del día del Santo Patrón, del día de la Policía, es cuando se tiene conciencia de pertenecer a un hermoso colectivo con una historia y con una entrega generosa a España.

El Arzobispo Castrense continuó: ”Vosotros que tocáis las aguas subterráneas de la sociedad, donde están los diablos que producen el mal en el corazón de los ciudadanos. Porque no podemos caer en el buenismo de pensar que todo el mundo es bueno. El mal existe y es inherente a la naturaleza humana”. Tras esta afirmación Monseñor Juan del Rio reconoció la labor de los agentes de policía en su lucha contra el mal, no exenta de peligro, y les aconsejó: “amigos no os canséis de hacer el bien”